COMUNICADO
En un acto que desafía las bases mismas del Estado de Derecho, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, una vez más deja de lado lo establecido en nuestra Constitución y desconoce la realidad de nuestro país. Su reciente Sentencia, que proclama su COMPETENCIA para declarar INADMISIBLE el amparo interpuesto contra el Consejo Nacional Electoral, es un acto que no solo ignora la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, sino que también desconoce la Ley Orgánica de Procesos Electorales y su reglamento, así como el exhorto de la Sala Electoral al propio CNE, para que éste publique los resultados de la elección del 28J. En una sentencia carente de argumentos visibles, esta Sala no solo se arroga la potestad de desestimar una petición legítima, sino que se permite calificarla de TEMERARIA, un término que en el lenguaje coloquial se traduce en imprudencia e insensatez.
Pero la Sentencia no termina ahí. La abogada Dra. María Alejandra Díaz Marín, quien se atrevió a representar a un grupo de ciudadanos venezolanos que, representando a sus organizaciones políticas y sociales, levantaron la voz en defensa de la justicia y la transparencia, se ve ahora sometida a una múltiple condena: se ORDENA al Colegio de Abogados imponerle sanciones disciplinarias, se le IMPONE MULTA y una SUSPENSIÓN TEMPORAL DEL EJERCICIO PROFESIONAL que la margina del ámbito en el que ha decidido luchar por los derechos de sus compatriotas. Este acto no solo vulnera su derecho al trabajo y su integridad como profesional del derecho, sino que representa un ataque directo a los derechos de todos los ciudadanos venezolanos.
La Constitución, ese documento que debe ser nuestra brújula, ha sido tratada como un mero trámite y se desconoce nuevamente lo contenido en ella. Nos quieren forzar a dejarla de lado, a aceptar lo inaceptable, a resignarnos ante la injusticia. Pero tenemos la convicción de que hoy mas que nunca debemos defenderla y devolverle su dignidad republicana.
Desde CENTRADOS EN LA GENTE, hacemos un llamado a nuestros compatriotas para mantenernos firmes en la defensa de nuestros derechos humanos, civiles y políticos. No podemos permitir que nuestras voces sean silenciadas. Es momento de la patria, que somos todos. Nuestra exigencia es simple, nuestras libertades y derechos fundamentales deben ser respetados. La lucha por la justicia es, al fin y al cabo, la lucha por nuestra propia dignidad.
CENTRADOS EN LA GENTE
DIRECCIÓN NACIONAL
Caracas, 5 de noviembre de 2024